‘Ruis’, pionero de la caricatura política de izquierda: Helguera

Ciudad de México.- Eduardo del Río Rius (1934-1937) abrió la caricatura política para la izquierda en los periódicos de México, afirmó este sábado el monero Antonio Helguera en el homenaje póstumo que la XVII Feria Internacional del Libro (FIL) en el Zócalo rindió al reconocido caricaturista, historietista y escritor, fallecido el pasado 8 de agosto.

Al lado de periodistas como Julio Scherer, fue figura determinante en la revolución que experimentó la prensa mexicana, expresó el colaborador de La Jornada, quien alternó en el acto con sus colegas Rafael Barajas El Fisgón y Rafael Pineda Rape.

“Rius retomó la tradición de la caricatura mexicana del siglo XIX, que es abiertamente de combate y de fregadazos abiertos a la cara, pero lo corrieron de todos los medios y espacios periodísticos posibles. Otros hubieran claudicado, pero inventó un nuevo género y sus propios espacios, sus propias revistas”, explicó Helguera.

“Al hacer esto, Rius inventó más cosas. Lo que él provocó al final fue que la caricatura mexicana se abriera hacia la izquierda. Es decir, él conquista la caricatura política para la izquierda. Después de él, la caricatura política primordialmente fue de izquierda, los caricaturistas mexicanos fueron primordialmente de izquierda”.

El monero resaltó el papel determinante que tuvieron las revistas fundadas por el desaparecido creador al ser semilleros para nuevos caricaturistas estupendos, como Naranjo y Helio Flores.

“Rius creó varias generaciones de caricaturistas que fuimos conquistando los espacios en los periódicos para la izquierda. Al hacer eso, abrió también la prensa misma. Cuando comenzó a publicar Los supermachos y Los agachados lo que hizo fue romper la muralla de censura y abrió un camino de libertad de expresión”, dijo.

“Gracias a esa vereda que se abrió, en la que hubo personajes como Julio Scherer y otros periodistas, se pudieron fundar en México medios críticos e independientes en los cuales ahora trabajamos. Esa fue conquista enorme a la que él contribuyó”.

En su turno, El Fisgón, también colaborador de La Jornada, describió a Rius como un fenómeno cultural en México, pues casi todas los hogares del país cuentan por lo menos con alguno de sus más de cien libros, y refrendó que él cambió la manera de leer en el país.

A su decir, lo que se leía en México en los años 30, 40 y 50 del siglo pasado eran historietas y Rius fue sensible a esa manera de leer de la sociedad y lo convierte en una virtud al aprovechar la historieta con su enorme potencial didáctico, romper una serie de barreras que había en la sociedad mexicana y adentrar a gran cantidad de personas en la lectura.

La caricatura funciona como un puente entre el pensamiento abstracto y el concreto, lo cual la convierte en una herramienta didáctica poderosa, comentó El Fisgón, quien subrayó la capacidad de Rius para entender ese potencial e inclusive crear un nuevo género: la historieta de divulgación didáctica, que sirve muy bien para entender temas complejos.

“Él fue gran maestro, no sólo con sus historietas, sino que convenció a muchos moneros a dedicarse a esta profesión. Fue un personaje de ética impecable, su congruencia era absolutamente incuestionable. Se mantuvo crítico hasta el final de sus días, a diferencia de muchos intelectuales que cambian conforme se acercan al poder”, concluyó El Fisgón.