Leopoldo Ramos, corresponsal

Saltillo, Coah. ¿Sospechan de alguien?, se le pregunta a Francisco Javier Arjón Villegas sobre la desaparición de su hermano Carlos Manuel, la mañana del 20 de diciembre de 2011 en algún lugar de Francisco I. Madero, en la comarca lagunera de Coahuila. “No, pues dijeron que eran los de la última letra, así se identificaron”, responde al referirse al cártel de Los Zetas que asoló la región entre 2005 y 2012.

Carlos Manuel García Villegas tenía entonces 36 años, estaba por casarse y trabajaba como mecánico de vehículos para una empacadora de carne de Gómez Palacio, Durango, al otro lado del río Nazas, cuyo lecho divide a los dos estados. Dos compañeros de trabajo salieron temprano a repartir y cobrar los pedidos de carne y horas después uno de ellos llamó para avisar que el vehículo se descompuso. Carlos Manuel y un ayudante los encontraron, pero se trataba de una trampa.

A los cuatro los secuestraron y sus plagiarios pidieron a la empresa un millón de pesos a cambio de liberarlos. El pago se hizo, pero los delincuentes no cumplieron con el trato y desde entonces se desconoce el paradero de los cuatro empleados.

En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas que establece la ONU este 30 de agosto, Francisco Javier sigue pistas para tratar de encontrar con vida a su hermano.

“Nosotros vamos recabando información con lo que oímos, lo que vemos; andamos caminando, buscando. Por ejemplo, tengo la idea de ir a San Pedro (municipio vecino de Francisco I. Madero, en la zona metropolitana de la Laguna), ahí donde estaban los vehículos (de las víctimas), y aunque ya pasó mucho tiempo no pierdo la esperanza”.

Reloj Actual - Hora Centro de México