Historiador Jonatan Gamboa expone: “Los Claroscuros de Porfirio”

En el contexto del aniversario luctuoso número 100 de Porfirio Díaz, cumplidos el pasado mes de Julio, el catedrático e historiador Jonatán Gamboa, expone la charla “Los claroscuros de Porfirio”, con motivo de retomar un análisis de una figura histórico-política tan controversial como lo fue Díaz.

Gamboa asegura que merece la pena analizar los diferentes aspectos y contradicciones de ésta figura, así de cómo se ha construido su memoria y explicar el proceso de construcción histórica de esa memoria. En sus propias palabras asegura: “Díaz es una figura controversial, hasta contradictoria para la historia de México y así lo entendemos, por eso titulamos la charla “Los claroscuros de Porfirio”, para comprender a este personaje desde todas sus contradicciones y como individuo sin juicios ni acusatorios ni reivindicadores, sino desde su complejidad y sobre todo, más allá de la persona, trataremos de mostrar el México de su tiempo, qué representó este periodo histórico para la comprensión del México actual”.

Un aspecto muy importante al que hace mención, es sobre los paralelismos encontrados con las coyunturas y contextos actuales, tales como Díaz pretendía proyectar la imagen de un México en desarrollo y moderno, listo para mostrarse ante el mundo como una nueva potencia, favoreciendo al capital extranjero y utilizó la represión para negar las grandes contradicciones internas y de oposición y  que finalmente terminaron exponiéndolo ante el mundo como un gran opresor, dicha violencia ejercida por pate del Estado hacia sus gobernados gestó a la Revolución.

El constructo de la memoria histórica se encamina en “enrolar” sujetos, dependiendo de las necesidades imperantes de los procesos sociales que se traten. Pues según comenta Jonatan Gamboa, en un momento histórico determinado como lo fue la Revolución Mexicana, que asegura, en veces de forma errónea se piensa en ésta como un proceso unívoco que caminaba hacia una misma dirección; cuando en realidad fue una convergencia de resultados por diversas coaliciones y choques políticos; en el proyecto de nación resultante, los “vencedores de la historia” señalan a ciertos sujetos para repartir culpas.

Además señaló, que si bien no se trata de “reivindicar” figuras históricas como “buenas” o “malas”, sino como sujetos históricos complejos, ya que a su vez, Díaz representa una figura bastante contradictoria, también vale la pena aceptar que mucho de su hacer aún tiene un eco y remanentes que siguen siendo notorios en la identidad construida del México moderno.