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Por Ángel Vargas
Ciudad de México. El libro Fundación Herdez, una restauración ejemplar va más allá de ser un puntual testimonio de “un caso de éxito” en los ámbitos del rescate, el cuidado y la preservación del patrimonio histórico de México: el edificio virreinal ubicado en la calle de Seminario número 18, a un costado del Templo Mayor, en el Centro Histórico de la capital de la República.
También demuestra la relevancia del ideario y el trabajo del arquitecto Luis Ortiz Macedo, fallecido en diciembre de 2013, quien fue una de las principales autoridades de aquella especialidad en el país y el responsable de las obras de reintegración de ese histórico inmueble, el cual, entre otras funciones, fue parte de la primera universidad de América, la Real y Pontificia Universidad de México.
Durante la presentación del libro, realizada la noche del martes en la sede de la Fundación Herdez, ubicada en Seminario número 18, la arquitecta María Dávalos sostuvo que la constante evolución de la Ciudad de los Palacios, como en otrora se conociera a la capital mexicana, invita a plantear la relación que debe guardar el
patrimonio con el inevitable paso del tiempo y los cambios que esto implica.
La especialista recordó que la restauración del edificio de Seminario 18 corresponde originalmente al empeño de Ortiz Macedo para que no fuera demolido, ya que se encontraba en ruinas y en un espacio donde se desplantaba la pirámide deTezcatlipoca
Es un edificio vecino al conjunto que en 1978 se derribó por órdenes del entonces presidente José López Portillo. Todo esto para excavaciones del Templo Mayor, precisó la arquitecta, quien reconoció asimismo la valiosa aportación de Enrique Hernández-Pons, creador de la Fundación Herdez, fallecido en 2000, para el rescate de esa hermosa edificación virreinal, construida en el siglo XVIII y restaurada entre agosto de 1996 y septiembre de 1997.
Por su parte, el arquitecto Ricardo Prado Núñez, quien fue el director de esas obras, aclaró que lo que se practicó al edificio fue una reintegración, más que una remodelación. Es decir, explicó, se recuperó su forma original, que prácticamente había perdido.
El libro Fundación Herdez, una restauración ejemplar consta de cinco capítulos y una memoria fotográfica de alrededor de 100 imágenes obtenidas en diferentes archivos del país.
Los capítulos son: Reflexiones en torno de la restauración del edificio de la Fundación Herdez, de Luis Ortiz Macedo; Ruinas sobre ruinas: de los aposentos de Tezcatlipoca a las aulas de la Universidad, de Leonardo López Luján; El edificio de Seminario 18, hoy sede de la Fundación Herdez, de Ricardo Ignacio Prado Núñez; La defensa y la gestión del Patrimonio Histórico y Artístico del Centro Histórico de la Ciudad de México, de Mónica Cejudo; y Fundación Herdez: la creación de un sitio con vocación social, educativa y cultural, de Lorenzo Rocha Cito.
