Karla Torrijos
Ciudad de México. Los adeudos en los que incurren diversos equipos del futbol mexicano, tanto de la primera división como del Ascenso, “en muchas ocasiones se deben a que los clubes son propiedad de pequeñas empresas familiares y no dependen de una televisora, una cementera o un gran emporio que los respalde”, indicó José Antonio García, ex directivo del balompié nacional.
Ante los constantes casos de falta de pago de salarios a jugadores, como ocurre actualmente en el Atlante, cuya directiva fue exhortada recientemente por la Asociación Mexicana de Futbolistas a cubrir los adeudos que tiene con sus jugadores, o de lo contrario, procederá como corresponde; o como sucedió recientemente con Jaguares y Puebla, García precisó que dichos equipos no reciben grandes ingresos “simplemente porque sus dueños no son millonarios.
“Como en todas las empresas, el dinero va y viene, a veces hay tiempos buenos, pero también muy malos y no siempre persiste la abundancia. Esta situación es un reflejo de lo que sucede en el país. Hay gente poderosa que siempre tiene dinero, pero hay otros que luchan por sobrevivir, lo mismo sucede en el futbol”.