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Afp
Londres. El Liverpool sufrió hasta el límite para ganar 2-1 al Tottenham (3º), este domingo en Anfield, logrando un resultado que le permite recuperar el primer puesto de la Premier League, con dos puntos de ventaja sobre el Manchester City (2º).
Los Citizens se habían situado primeros el sábado al derrotar 2-0 al Fulham (19º) y los Reds tenían toda la presión.
Pero con un ambiente espectacular, el equipo dirigido por Jurgen Klopp logró el triunfo gracias a un gol en propia puerta del belga Toby Alderweireld, tras un despeje fallido de su arquero, el francés Hugo Lloris (90). Había rematado de cabeza Mohamed Salah.
‘Feo, pero… ¿a quién le importa?’
“En la primera mitad tuvimos grandes ocasiones y marcamos un gran gol, luego estuvimos más pesados. El Tottenham cambió un poco y no nos adaptamos. Hay 500 caminos para ganar un partido y hoy fue algo feo, pero… ¿a quién le importa?”, señaló Klopp.
El brasileño Roberto Firmino había puesto por delante a los locales, de cabeza (16), y su compatriota Lucas Moura logró el empate (70).
El antiguo jugador del PSG se encontró con el balón tras un remate en ‘semifallo’ del danés Christian Eriksen, en una jugada que había desencadenado Harry Kane al sacar una falta rápidamente.
“Tuvimos un poco de mala suerte en el segundo gol, cuando deberíamos haber sentenciado porque dominamos al Liverpool, un gran equipo”, dijo el técnico de los Spurs Mauricio Pochettino.
Cuando restan seis jornadas para finalizar la temporada, el Liverpool tiene 79 puntos, dos más que el City, en un mano a mano espectacular entre un conjunto Red que no gana el campeonato desde 1990 y el defensor del título.
Pero el equipo dirigido por Pep Guardiola se guarda una carta, ya que tiene un partido menos.
En el coliseo de Liverpool, el equipo entrenado por Jurgen Klopp sufrió de lo lindo. Antes de explotar de alegría, el francés Mousa Sissoko tuvo el 2-1 para el Tottenham, pero disparó alto cuando se jugó un ‘dos contra uno’ acompañado por Moura y muy bien defendido por el holandés Virgil Van Dijk.
