Personas peregrinan en hospitales para buscar a víctimas de explosión

Jessica Xantomila 

Ciudad de México. Al hospital Magdalena de las Salinas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) llegó un grupo de familiares de personas desaparecidas que señalan se encontraban en la explosión de la toma clandestina de un ducto de Petróleos Mexicanos en Tlahuelilpan, Hidalgo.

Con fotografías de sus seres queridos, pidieron entrar para ver a los pacientes que se encuentran ahí hospitalizados. Una de ellas era Blanca Hernández, quien busca a su primo José Manuel Hernández Sánchez, de 28 años, un carpintero que “por curiosidad” acudió al sitio y desde el viernes no saben de él.

Su prima aseguró que uno de sus compañeros de trabajo lo llevó a las cercanías del ducto pero desconocen si alcanzó a llegar ahí ya que según éste lo dejó “un poquito retirado” del lugar.

José Manuel vivía con su esposa e hijo, ella fue quien informó que no había llegado y aunque salieron a buscarlo al ducto no encontraron su cuerpo ni han visto su nombre en las listas de los heridos hospitalizados.

Blanca Hernández señaló que la hermana de José Manuel se hizo ya las pruebas de ADN para que logren identificar su cuerpo pero no han tenido más información.

Expuso que los familiares están inconformes con la labor para localizar cuerpos en el ducto. “Por las redes sociales se veía que había demasiada gente, los cuerpos recuperados se ven que aún son muy pocos. La molestia quizá de algunos fue que se tapó el lugar donde había sido el siniestro, donde todavía pudimos haber reconocido cuerpos u algo que quedara de nuestros familiares”.

El grupo de personas que llegó al hospital fue trasladado en dos camionetas proporcionadas por la presidencia municipal de Tlahuelilpan.

Los familiares llegaron a este hospital porque les informaron que en varios nosocomios de la Ciudad de México había heridos sin identificar. Su recorrido incluía el Hospital Infantil de México Federico Gómez, así como el Hospital Central Militar y el Hospital de Lomas Verdes del IMSS.

María Socorro Cornejo Ángeles busca a su sobrino José Valentín Hernández y la esposa de éste, Jessica Bautista. Ellos acudieron al ducto porque les dijeron que ahí estaban tomando gasolina y a falta de ésta “se les hizo fácil ir, no son huachicoleros, no se dedicaban a eso pero la misma necesidad los hizo llegar ahí”.

Cuando la familia fue a buscarlos, no los dejaron pasar a la zona del ducto, al siguiente día les permitieron ver algunos cuerpos pero estaban irreconocibles. “Lo que pedimos es ayuda para encontrarlos vivos o muertos, los queremos”, dijo María.

Añadió que también ya se hicieron las pruebas de ADN para identificar los cuerpos calcinados, pero pidió que se agilicen. “Nos hablan de hasta un mes o dos. Es demasiado tiempo y la angustia es mucha”.

José Valentón, es taxista, y Jessica, se dedicaba a su hogar, ambos eran padres de una niña de 8 años, y un niño de tres.

A los familiares, personal del hospital les dijo que no había personas sin identificar por lo que se retiraron a seguir buscando a sus seres queridos.