Concluyen México y Brasil negociaciones económicas

Por Susana González G.

Ciudad de México. La Secretaría de Economía (SE) informó que la segunda ronda de negociaciones entre México y Brasil sobre la ampliación del Acuerdo de Complementación Económica número 53 (ACE 53) para incrementar el intercambio comercial y los flujos de inversión entre ambas naciones, concluyó ayer en la ciudad de Brasilia con avances en rubros que van desde acceso a mercados y facilitación del comercio hasta temas en propiedad intelectual, reglas de origen y compras públicas, pero no proporcionó detalles al respecto.

“Por otro lado, se avanzó decididamente en la negociación que tiene por objeto el reconocimiento mutuo de la cachaza y del tequila como indicaciones geográficas y productos distintivos de Brasil y México, respectivamente”, abundó.

El ACE 53 entró en vigor desde mayo de 2003 y ambas naciones establecieron preferencias arancelarias en mil 536 clasificaciones de productos, un número que representa tan sólo 12.69 por ciento de las más de 12 mil 100 clasificaciones arancelarias que México maneja en sus aduanas.

Ambas naciones concentran 65 por ciento del producto interno bruto (PIB) de América Latina pero su comercio bilateral no ha alcanzado ni siquiera los 10 mil millones de dólares anuales en el último trienio, por lo que el objetivo principal para renegociar el ACE 53 es lograr una liberación más amplia del intercambio comercial.

Cifras oficiales indican que el año pasado, por ejemplo, el comercio entre México y Brasil fue de 8 mil 420.9 millones de dólares, equivalente a 1.08 por ciento por ciento de la balanza comercial total de México con el mundo y la cifra resultó menor al 1.15 por ciento que tenían cuando arrancó el ACE en 2003 y al 1.27 por ciento correspondiente a 1993, antes de que México iniciara su apertura comercial.

“Brasil es el primer destino de exportaciones y primer proveedor de México en la región, así como fuente latinoamericana prioritaria de inversión en México con 2 mil 301 millones de dólares acumulados entre enero de 1999 y septiembre de 2015”, según la SE.

Reduce Brasil petición de reducir aranceles

Los gobiernos Brasil y México anunciaron su intención de iniciar negociaciones para expandir el acuerdo desde 2010, pero esto comenzó a concretarse en mayo de 2015 cuando la presidenta Dilma Rousseff visitó México.

De hecho, Brasil propuso que se firmara un Acuerdo de Libre Comercio, pero al final sólo se acordó ampliar el ACE 53. La primer ronda de negociaciones se llevó a cabo en julio de 2015 y en diciembre pasado la cancillería brasileña informó que se hizo un intercambio de “lista de bienes comerciales” y de las ofertas en diversos temas, tanto industriales como agrícolas, que cada país quiere que se incluyan en la ampliación del acuerdo.

Ese listado de peticiones fueron evaluadas en la segunda ronda de negociaciones que se llevó a cabo del 16 al 18 de febrero, encabezadas por el subsecretario de comercio exterior de la SE, Francisco de Rosenzweig, y el subsecretario general de América del Sur, Central y El Caribe, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Paulo Estivallet de Mesquita.

En principio Brasil buscaba que México redujera aranceles en 6 mil clasificaciones de sus productos, pero modificó la cifra a 4 mil clasificaciones. Además de la ampliación de las preferencias arancelarias de diversas mercancías, las negociaciones también incluyen otros temas que ahora ya forman parte de los acuerdos comerciales de nueva generación como el sector servicios, propiedad intelectual, comercio electrónico, compras gubernamentales y se prevé que a partir del consenso bilateral que se obtenga de cada sector productivo se negocie cada capítulo del ACE que los involucre.

Los gobiernos mexicano y brasileño tienen el compromiso de “mantener un diálogo franco, abierto y constructivo que facilite las discusiones y contribuya a lograr un acuerdo amplio en beneficio de los sectores productivos de ambos países”, aseveraron los subsecretarios Rosenzweig y Estivallet, según la SE.

La dependencia señaló que hubo avances en la discusión de acceso a mercados, reglas de origen y en los textos sobre facilitación de comercio, servicios, inversión, medidas sanitarias y fitosanitarias, compras públicas, obstáculos técnicos al comercio, propiedad intelectual, coherencia regulatoria y en política de competencia y remedios comerciales.