Por Julio Reyna Quiroz
Ciudad de México. En una época de desaceleración económica, los gobiernos requieren políticas fiscales más rigurosas, principalmente de mayor recaudación.
Un incremento en la recaudación fiscal debería provenir de las inversiones extranjeras directas de compañías extranjeras, consideró Christian Bernabé Vázquez Sánchez, especialista en temas de finanzas y profesor en la Universidad Panamericana.
Aumentar los impuestos a las personas físicas “difícil por que ya estamos superexprimidos”, y una circunstancia similar ocurre con las pequeñas y medianas empresas, dijo en una entrevista.
“Si garantizamos que estas empresas generan la riqueza que deberían generar y pagan los impuestos que deben de pagar, habrá crecimiento económico, pequeño pues, pero habrá mayor recaudación”, afirmó Vázquez Sánchez.
“Sin duda la estrategia debería ser una estricta recaudación con los grupos de trasnacionales que dejan una inversión extranjera directa; porque vienen empresas México pero no tiene sentido si no generan utilidades y no pagan los impuestos que deberían”, agregó.
Además de estar ya exprimidos, los impuestos de las personas físicas y pequeñas y medianas empresas no serían “sustanciales” en una comparación con las firmas trasnacionales, indicó Vázquez Sánchez.
La coyuntura actual requiere que los países, por medio de sus fiscos, recauden lo más posible, pues al menos el panorama se vislumbra hacia una desaceleración económica mayor, dijo.