Clara Zepeda
Tras siete años de la operación de dos Bolsas en México, la competencia en el mercado bursátil mexicano todavía no se abre por completo, lo cual obstaculiza el crecimiento, afecta al inversionista y se pierde competitividad a nivel internacional, aseguraron directivos de la Bolsa Institucional de Valores (Biva).
Durante la reunión de fin de año con representantes de los medios de información, María Ariza, directora general de Biva, explicó que estas ineficiencias de operación hacen que los inversionistas internacionales perciban que la regulación mexicana es demasiado complicada, por lo que les cuesta capital. Lo anterior, representa un riesgo, ya que los grandes fondos internacionales pueden decidir operar en otros países como Brasil o Chile, en lugar de México.
“Nosotros vamos a seguir buscando que esa barrera que nosotros encontramos la podamos derribar. Creo que eso es una parte importante en el mercado, una parte en donde cualquier empresa pueda decidir en qué bolsa estar por las condiciones que así prefiera para su posición y sus estrategias (…) es como si el campo de juego bursátil estuviera diseñado para beneficiar a un solo equipo, impidiendo que el crecimiento y la eficiencia total del mercado se manifiesten, afectando en última instancia a los inversionistas y emisores que buscan las mejores condiciones”, comentó Ariza.
Es por ello que están trabajando con las autoridades financieras mexicanas para llevar a cabo estos cambios, tales como que la totalidad de las posturas que Biva realiza sean registradas, hasta el final de la jornada, ya que hay inversionistas que eso quieren y tienen que deshacerla si no se registran las de Biva hasta el cierre, y cuando cambian las condiciones del mercado cambiaron.
También será importante que los índices accionarios sean abiertos, ya que el FTSE Biva, con 42 emisoras (acciones y Fibras) le da cabida a todos los participantes; mientras que el IPC de la BMV, con 47 años de existencia, es cerrado, sólo alberga acciones, pero con la historia del indicador, es común que las empresas, si su objetivo es pertenecer al IPC, mejor decidan financiarse en la BMV antes que en Biva, una barrera competitiva, detalló Eduardo Calderón, director de operaciones en la plaza bursátil.
2026, complicado, pero mejor
Con la renegociación del T-MEC, el 2026 se vislumbra complicado, pero en materia de crecimiento económico, el costo del dinero más bajo y un mayor apetito de los inversionistas, podría ser mejor que este 2025.
Tan sólo Francisco Valle, director de emisoras en Biva, reveló que para el próximo año se tienen vencimientos, por un monto de hasta 197 mil millones de pesos, por lo que se prevé mucha actividad en el mercado de deuda privada.
En tanto, que en acciones hay proyectos y dado que el capital se abarató y hay mejores múltiplos se espera que puedan llegar al mercado de capitales. Por lo que hay 10 emisores listos y 20 se están preparando.
Por su parte, Daniela Calleja, directora de nuevas emisoras, prevé que por lo menos hay tres emisiones bajo la figura de oferta simplificada, la cual nació con la reforma a la Ley del Mercado de Valores, y están en deuda y capitales.
