Ciudad de México. Jobany Torres Becerra, el estudiante mexicano envuelto en una polémica con autoridades de Nicaragua, quienes lo acusaron y sentenciaron por presuntamente fingir su secuestro, llegó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), en el vuelo 651 procedente de Managua.
El joven de 23 años de edad estudia Ciencias de la Tierra en la Universidad Autónoma de Zacatecas, entidad de donde es originario. El 10 de marzo viajó a ese país centroamericano para realizar prácticas profesionales en la Minera Hemco.
El 31 de mayo directivos de la empresa lo reportaron como desaparecido, por lo que la policía y elementos del Ejército iniciaron su búsqueda.
Según declaraciones de su hermano, Carlos Torres, hechas a medios de comunicación en Zacatecas, Jobany no quería permanecer más en ese país y temía por su seguridad. Así que decidió salir de las instalaciones de la empresa sin avisar a nadie.
El 1 de junio fue detenido cuando pretendía tomar un vuelo de regreso a México y durante 13 días permaneció incomunicado, lo cual generó tensión entre ambos países.
Finalmente el pasado lunes fue presentado ante el juez quinto local penal de Managua, Walter William. Jobany Torres tenía los ojos rojos y moretones en los párpados inferiores, «que él mismo se provocó», según las autoridades nicaragüenses.
En la diligencia aceptó haber simulado su secuestro, por lo que fue sentenciado a 100 días de multa y la deportación inmediata.