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Fernando Camacho Servín
Ciudad de México. En México siguen existiendo graves problemas de derechos humanos, entre ellos los asesinatos, desapariciones y casos de tortura cometidos por las Fuerzas Armadas al realizar tareas de seguridad pública; la impunidad y corrupción en el sistema de impartición de justicia y las constantes agresiones contra migrantes, periodistas y defensores de derechos humanos, advirtió el Departamento de Estado estadunidense.
En el apartado sobre México de su ‘Reporte de Prácticas de Derechos Humanos 2016’, el organismo añadió que también persisten problemas en materia de detenciones arbitrarias, malas condiciones del sistema carcelario, tráfico de personas, trabajo infantil y violencia contra mujeres, personas con discapacidad, indígenas y grupos de diversidad sexual.
Al detallar cuáles son los principales conflictos de derechos humanos en el país, el Departamento de Estado indicó que hay “muchos reportes de que agentes del gobierno cometieron ejecuciones extrajudiciales, frecuentemente en medio de la impunidad”, y consignó que algunos asesinatos cometidos por el crimen organizado contaron con la complicidad de funcionarios de seguridad.
Entre los ejemplos que menciona el organismo en este apartado se encuentra la ejecución de 22 supuestos delincuentes en Tlatlaya, al igual que el asesinato de civiles en Apatzingán y en Tanhuato, Michoacán.
De igual forma, lamentó la existencia de una gran cantidad de casos de desaparición cometidos tanto por grupos delincuenciales como por las propias fuerzas de seguridad del gobierno, así como la escasez de sentencias y la falta de claridad en la tipificación del delito en los 32 estados de la República.
Con respecto a la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes, el organismo encargado de las relaciones exteriores de Washington puntualizó que sigue habiendo reportes de que los funcionarios mexicanos siguen utilizando dichas herramientas.
Aunque no hay un registro nacional de casos de tortura, la Procuraduría General de la República (PGR) informó haber recibido 4 mil denuncias por este delito en los primeros nueve meses de 2016. De igual manera, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dijo que hasta finales de octubre del año pasado, registró 206 posibles casos de tortura y 451 de tratos inhumanos o degradantes.
