Puebla. La tarde de ayer fue detenido por la Fiscalía General del Estado (FGE) un sujeto que presuntamente habría sido autor, junto con otro, de la masacre de Coxcatlán, revelaron fuentes cercanas a las investigaciones, quienes agregaron que el individuo fue contratado por el artífice intelectual del crimen, el cual sólo ha sido identificado ante los medios de comunicación como Adán.
Oficialmente, la detención de uno de los dos homicidas de El Mirador no ha sido realizada por la dependencia estatal. Sin embargo, ayer el alcalde de Coxcatlán fue quien dio a conocer la detención en un programa de televisión por internet y luego, esta mañana personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) que trabaja en las indagatorias ha corroborado dicha información.
El hombre detenido este martes respondería al nombre de Carlos, sus apellidos, al igual que los de su cómplice, han sido omitidos para salvaguardar la efectividad de las pesquisas.
Al parecer, algunos de los sobrevivientes de la masacre lograron identificar al detenido, quien desde ayer por la noche se encontraría en las instalaciones centrales de la FGE, donde rindió sus primeras declaraciones ante la gente del Ministerio Público en la madrugada de hoy.
Carlos habría dado pistas sobre el paradero de Adán, a quien agentes ministeriales, en coordinación con sus homólogos de Oaxaca, buscan en los límites de ambas entidades.
El jueves de la semana pasada por la tarde, once integrantes de una familia avecindada en la comunidad de El Mirador, perteneciente a Coxcatlán, fueron asesinados con tiros de escopeta y pistola calibre 22. En el ataque perecieron siete mujeres, una de las cuales estaba embarazada y también murieron dos menores de edad. A la agresión sobrevivieron dos niñas de apenas cuatro años de edad, quienes fueron atendidas de sus lesiones en un hospital en la capital poblana, donde se encuentran bajo el programa de Testigos Protegidos.
De acuerdo con la FGE, hay cinco testigos protegidos y se sabe que fueron al menos dos los hombres que perpetraron el crimen, los cuales llegaron y huyeron a pie.
La dependencia también descartó que el móvil de los asesinatos haya sido un ajuste de cuentas de bandas de narcotráfico o un conflicto de índole religioso.
La principal línea de investigación de la FGE es el principal autor de la masacre, quien presuntamente habría violado hace nueve años a una de las víctimas y quien quedó embarazada. En la nueva agresión, la víctima sobrevivió.
El asesino habría advertido a la madre del infante que si se volvía a unir con otro hombre, la ultimaría.