Menos obra y recortes: la SCT que vivió Jiménez Espriú

 Javier Jiménez Espriú se va de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). Renuncia en medio de una crisis que se ha resentido primero en el sector aeronáutico –regulado por esta dependencia-; pero antes de ello haber sido una voz predominante en la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) y conducir las investigaciones sobre el accidente aéreo en el que murieron los ex gobernadores de Puebla Martha Érika Alonso y Rafael Moreno Valle.

La SCT de Jiménez Espriú se volvió accesoria de los grandes proyectos de infraestructura que promueve el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero fundamental en la cancelación de Texcoco. Si bien el mismo ingeniero documentó las inconsistencias de la construcción y financiamiento en el NAIM, un nuevo puerto aéreo en Santa Lucía quedó a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional para evitar corrupción.

Recorte de recursos y la menor presencia en obra pública no lograron un quiebre hasta que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció el 17 de julio la militarización de los puertos del país. “Vamos a que esta secretaría tan prestigiada, la Secretaría de Marina, nos ayude para garantizar la paz, la seguridad pública, la seguridad del Estado, la seguridad nacional, en las costas, en los puertos donde tenemos problemas”, abundó el mandatario el 20 de julio, una vez trascendió la posible renuncia de Jiménez Espriú.

El embate por los puertos se remonta a octubre pasado, cuando el grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados promovió una iniciativa de ley para quitar a la SCT las tareas de seguridad en puertos y pasarlos a Marina, también dar permisos y concesiones y hacerse cargo del dragado. En más de una ocasión el secretario expuso que no se le consultó al respecto y el control militar en puertos es marca de regímenes autoritarios como Chile bajo el gobierno de Augusto Pinochet.

Antes de esto, Jiménez Espriú, acompañó a López Obrador en el proceso de cancelación del NAIM en octubre de 2018 y si bien no votó para “ser imparcial” –como refirió en ese momento-, luego lanzó un documento técnico en el que justificó las razones para cancelar la obra. Posterior a ello dio cuenta de la deuda que dejó el financiamiento del aeropuerto a pagarse en 19 años desde su cancelación.

En el caso del accidente del 24 de diciembre de 2018 donde murieron Martha Erika Alonso y su esposo Rafael Moreno Valle, ella gobernadora de Puebla y él ex gobernador, así como la tripulación, el funcionario rechazó un sabotaje a la aeronave. “No debió haber volado, debió quedarse en tierra”, remarcó dado que 11 días antes la empresa sabía de fallas en el motor.

La explicación fue tachada de “inverosímil” por la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN) en voz de Marko Cortés, quien previamente cuestionó al gobierno federal “¿qué o quién tumbó el helicóptero?” como parte de su agenda política.

Por último, el secretario renuncia en medio de una crisis económica que ha tenido entre sus principales flancos la aviación. Si bien no se harán rescates a las aerolíneas, se promueve el apoyo a través del programa de garantías y el aplazamiento de pagos con todas las diversas dependencias del gobierno federal.

La renuncia de Jiménez Espriú es la tercera en una Secretaría de Estado. La primera en mayo de 2019 a cargo de Josefa González Blanco a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales; la segunda en julio, de Carlos Urzúa a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Antes de ser secretario de la SCT, Jiménez Espriú, fue subsecretario de Comunicaciones y Desarrollo Tecnológico de 1982 a 1988 en la administración de Miguel de la Madrid. Durante su gestión tuvo a su cargo la coordinación del proyecto del “Sistema de Satélites Morelos”.

El ingeniero mecánico electricista por la Universidad Nacional Autónoma de México, regresó a ésta como director de la Facultad de Ingeniería en el período 1978-82 y luego como secretario general administrativo de la Máxima Casa de Estudios por el Rector el Dr. Guillermo Soberón. En 2008 recibió el Premio Nacional de ingeniería de la Asociación de Ingenieros y Arquitectos de México.