Milicia y Justicia / Militares, lazos con EU en la era de Trump

Jesús Aranda

Ante la evidente falta de capacidad del gobierno de Enrique Peña Nieto para enfrentar la retórica y amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, hay quienes piensan que las fuerzas armadas estarían en posibilidad de mitigar los embates del próximo inquilino de la Casa Blanca, a través de los buenos lazos que mantienen y que han desarrollado con los militares de ese país en los últimos años.

Sería deseable que militares y marinos no tomaran cartas en el asunto, que no se conviertan en la última línea de defensa, como ocurrió cuando tuvieron que salir de los cuarteles para enfrentar la delincuencia organizada.

Lo que es un hecho es que el gobierno de Peña no ha sabido aglutinar a la sociedad mexicana en un gran frente de apoyo en contra de la política anti migrante y ahora, anti comercial de Trump. ¿Por qué Peña no hace una convocatoria para fortalecer el mercado interno, por qué no anuncia incentivos fiscales para los productos mexicanos y grava los extranjeros, por qué no anuncia que las compras que realice su gobierno serán con compañías mexicanas o asentadas en nuestro territorio?

Mientras el jefe del ejecutivo continúa pasmado y no atina a responder a la retórica de Trump, los altos mandos del Ejército y de la Armada de México están ante la posibilidad de hacerle ver a sus contrapartes estadunidenses que lo mejor para ambos países, en materia de seguridad, es que haya una relación fluida y respetuosa entre ambas naciones.

El que los militares estadunidenses se sensibilicen o sensibilicen a su próximo mandatario de mantener una relación bilateral respetuosa con México, eso ya es harina de otro costal.

El miércoles pasado, los titulares de la Defensa Nacional y de Marina participaron, de forma inédita, en una sesión privada en la reunión anual de embajadores y cónsules de México en el extranjero; de acuerdo con diplomáticos que estuvieron presentes, el tema que abordaron fue la seguridad y soberanía nacionales.

“Focos rojos” por el nuevo marco legal para las fuerzas armadas

Desde hace años, las fuerzas armadas solicitaron la aprobación de un marco legal para regularizar las acciones de seguridad pública y seguridad interior; todo parecía marchar bien con el anuncio de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión de que iniciaron los foros sobre el tema.

Sin embargo, el gasolinazo prendió los “focos rojos” en los altos mandos de las Secretarías de la Defensa Nacional y de Marina porque hay temor entre algunas organizaciones defensoras de derechos humanos y sectores de oposición de que con ese nuevo paraguas legal, militares y marinos serán utilizados para reprimir las manifestaciones y acciones ciudadanas contra el incremento en los precios de las gasolinas.

Ante este panorama, y la incertidumbre que hay, no estaría de más que los titulares de la Defensa Nacional y de Marina, general Salvador Cienfuegos Zepeda y almirante Vidal Francisco Soberón Sanz, ejerzan sus buenos oficios con los legisladores para que en la nueva normatividad no quede el mínimo resquicio para que el poder civil –a nivel federal, estatal o municipal- pretenda utilizar a soldados y marinos para “contener” manifestaciones o movimientos sociales.

Cuando, en su momento, el presidente Vicente Fox tuvo la idea de utilizar a los soldados para sofocar el movimiento social que sacudía el estado de Oaxaca en el año 2006, en aquel entonces, el general secretario Gerardo Clemente Vega García le dijo al presidente panista que los soldados intervendrían en el conflicto, con la condición de que le entregara la orden por escrito.

Por supuesto que eso nunca ocurrió, con lo que se frustró la intención del presidente panista de utilizar a los soldados para remediar problemas sociales generados por la autoridad civil.

Estaría bien que los legisladores tomen en cuenta estos hechos y eviten en la nueva norma la posibilidad de que los soldados asuman labores que no les corresponden, como es contener manifestaciones, disolver manifestaciones o reprimir movimientos sociales.

Lo único que piden los mandos militares y navales es que el Congreso defina cuáles serán las atribuciones de soldados y marinos, porque es preocupante el número de efectivos que están bajo proceso penal o en prisión, acusados de cometer delitos (la mayoría por presunta violación a los derechos humanos) por cumplir con labores de seguridad pública, que por cierto, no les corresponden.

La Comisión Nacional de Seguridad contra Andrés Manuel López Obrador

La reciente “filtración a la prensa” de una tarjeta interna de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) en la que se menciona al líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, y a otros políticos de izquierda como presuntos incitadores de los saqueos y marchas contra el gasolinazo, es un golpe artero del gobierno federal que pretende deslegitimar no sólo a los políticos involucrados, sino las legítimas protestas por el incremento de los hidrocarburos.

Además, llama la atención la falta de análisis y de verificación de información en ese documento.

Si se trataba de un documento de trabajo, como, centenares de textos que elaboran los órganos de inteligencia del gobierno federal, ¿para qué filtrarlo a medios proclives al gobierno para atacar al principal líder opositor?

O bien, si se trataba de un documento “más elaborado”, entonces es comprensible por qué el país está sumido en la ingobernabilidad en muchas partes del país, porque los análisis de inteligencia están de pena ajena.

Canal Judicial y el Centenario de la Constitución

En los próximos días, el Canal Judicial comenzará la transmisión de unos documentales conmemorativos del Centenario de la Constitución Mexicana. Uno pensaría que por tratarse del medio informativo del máximo tribunal del país y del “guardian de la constitución”, ese material tendría que ser de primera calidad.

Sin embargo, nos cuentan que uno de los platillos fuertes será el tema relacionado con el Caso Radilla, el cual cobró trascendencia porque la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió que el fuero militar no aplica cuando soldados cometan delitos en agravio de civiles.

Todo estaría bien si no fuera por un detalle, en el caso Radilla no se analizó un tema de constitucionalidad; es decir, el asunto fue importante para la historia de la Corte, pero no es tema relacionado con los 100 años de la carta magna, el cual se festejará el próximo 5 de febrero.

¿Falta de previsión, incapacidad o desconocimiento de la dirección del Canal Judicial?

@jaranda24