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Elio Henríquez
San Cristóbal de Las Casas, Chis. La muerte de Samir Flores, dirigente en la comunidad de Amilcingo, Morelos, “no puede ni debe quedar impune y tenemos que unirnos más que nunca para defender la tierra, porque con ello defendemos la vida”, afirmó Guadalupe Vázquez Luna, integrante del Concejo Indígena de Gobierno (CIG).
“No tengo palabras para calmar su dolor porque sé que no hay palabras que lo calmen; lo único que les puedo decir es que no están solos, que habemos muchos que nos unimos a su dolor y su lucha”, manifestó en un mensaje dirigido a familiares, amigos y compañeros del indígena nahuatl, comunicador comunitario y delegado del Congreso Nacional Indígena (CNI).
Samir, uno de los principales opositores del Proyecto Integral Morelos, (PIM), que incluye la construcción de latermoeléctrica de Huexca, fue asesinado a balanzos en su casa la madrugada del pasado miércoles.
“Realmente lo siento mucho y me indigna el asesinato del compañero; créanme que ese del dolor que hoy sienten con la partida del compañero, hermano, padre e hijo, yo lo pasé igual hace ya 21 años”, dijo la mujer zotzil, conocida cariñosamente como Lupita, a quien, siendo una niña todavía, le mataron a sus padres, hermanos y otros familiares en la masacre de Acteal, ocurrida el 22 de diciembre de 1997.
“Hasta pronto Samir, no has muerto, sino que hoy eres semilla que serás sembrada con respeto, honor, orgullo y amor, y como toda buena semilla crecerás y darás frutos”, expresó Vázquez Luna.
Agregó: “Y Como dijo mi padre: ‘Podrán matar mi cuerpo, pero no mi espíritu’; la lucha sigue. Animo, compañeros”.
