Por la Redacción
Ciudad de México. “Se necesita una mirada capaz de reflejar la ternura de Dios, obispos de mirada limpia, de alma transparente, de rostro luminoso. No le tengan miedo a la transparencia. La Iglesia no necesita de la oscuridad para trabajar”, afirmó el papa Francisco en la Catedral Metropolitana ante altos clérigos de la Iglesia católica mexicana.
“No se dejen corromper por el materialismo trivial, ni por las emociones seductoras de los acuerdos debajo de la mesa”, llamó el pontífice a obispos y cardenales.
El pontífice llamó a los religiosos a “contribuir gradualmente a aquella delicada red humana sin la cual todos seríamos desde el inicio derrotados por la insidiosa amenaza” del narcotráfico, un fenómeno “que devora” en México, junto con la “violencia que disgrega”.
El Papa Francisco rezó durante unos minutos en la Catedral Metropolitana después de saludar al jefe de Gobierno de la ciudad, Miguel Ángel Mancera, quien le entregó las llaves de la capital y una declaratoria de Huésped Honorífico.
El pontífice llamó también a revalorar las “fascinantes y muchas veces vilipendiadas” raíces culturales indígenas en México, que convierte al país en una nación única.
Antes y después de esos minutos de recogimiento, Francisco saludó fraternalmente a la gente que se le acercaba y a las autoridades locales y religiosas que se congregaban en el lugar.