Perdió su vivienda y fuente de trabajo; todos los días hace guardia en la acera

Angélica Enciso L.

Desde el miércoles pasado, un día después del sismo, María Elena Nute llega a las 10 de la mañana a la acera frente al edificio de Balboa 1117 en Portales Sur, que tiene severos daños y está deshabitado desde entonces. Conserje del inmueble desde hace 29 años, ella perdió no sólo su vivienda, sino su fuente de trabajo. Toda una vida. Mis tres hijos crecieron aquí y yo le aposté a permanecer en este lugar.

Una mesa y sillas de plástico le sirven de refugio en la jornada que termina a las 5 de la tarde. Los vecinos le ofrecen café, la saludan, y le preguntan cómo va todo. Para María Elena el futuro es incierto. No sabe lo que pasará con el edificio, si será demolido o lo repararán. Si mantendrá su fuente de trabajo o la liquidarán. ¿Qué es lo qué procede en estos casos?, se pregunta.

Por lo pronto ella, su hija y nietos viven en unos cuartos que les prestaron cerca de la salida a la carretera a Cuernavaca, pero es algo temporal. Los habitantes de los siete departamentos del edificio salieron desde ese día y no han vuelto a entrar. Las paredes tienen grietas, hay cascajo en las escaleras y vidrios rotos.

María Elena está en espera de que la administración del edificio le informe lo que pasará con ella. Recuerda que llegó a los 34 años, el edificio tenía unos cinco años de construido y desde entonces su vivienda fueron dos cuartos con baño y una cocineta en la planta baja, que quedaron destrozados con el temblor. En una esquina del edificio todavía está una placa con los apellidos de los encargados de la construcción: Alarcón, Cornish, Zendejas. Por ahora el inmueble está acordonado, pero aún no hay dictamen de protección civil.

En la zona de Portales hay alrededor de 30 edificios con daños, algunos con reportes de severos, de acuerdo con un recuento divulgado en la cuenta de Twitter @La_Portales.Entre ellos están los de Odesa 1222, Monrovia 1207, otros edificios de Nevado y Alhambra, de Balboa y Nevado, y Popocatépetl y Canarias. En muchos de ellos, los propietarios esperan saber si les dan el dictamen o alguna información sobre lo que procede. Mientras, la mayoría está alojado con familiares.

También hay edificios en construcción, como el de Vistahermosa 125, cuyos departamentos se venden entre 2.5 y 3 millones de pesos, que están acordonados en tanto se emite el dictamen oficial de la situación de la obra.