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Piden reforzar el plan contra el trabajo infantil en CDMX

Personal de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, formado por sicólogos, trabajadores sociales y una unidad médica móvil, recorren las calles de la ciudad para apoyar a los infantes a alejarse de las calles donde sus padres los tienen trabajando o en espera de que terminen su jornada de trabajo. Foto: Roberto García Ortiz

Bertha Teresa Ramírez 

Ciudad de México. La estrategia para disminuir y así tratar de erradicar el trabajo y la explotación infantil en las calles de la Ciudad de México promovidos por los propios padres o tutores, no sólo debe continuar, sino reforzarse, afirmó Claudia Luengas, titular de la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo (STFE) capitalina.

La funcionaria informó que del 30 de julio al 4 de octubre pasado, periodo en el que se reforzó la estrategia, fueron detectadas 758 personas relacionadas con este problema, de las cuales 339 son adultos y 419 niñas, niños y adolescentes.

Explicó que estas 758 personas pertenecen a 266 familias, de las cuales 156 provienen de 11 entidades del país, mayoritariamente de los estados de México, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Michoacán, Quéretaro, Guerrero, Hidalgo, Morelos y San Luis Potosí; mientras las otras 110 son de la Ciudad de México.

Abundó que 71 por ciento de esas 266 familias tiene su lugar de residencia en la capital del país y 29 por ciento en el estado de México.

Durante el periodo señalado, siete menores de edad que se encontraban en riesgo y sin la supervisión de sus padres o un adulto en la vía pública fueron puestos a disposición de la agencia 59 del Ministerio Público, y además se han detectado 67 familias de diferentes grupos étnicos, agregó.

De acuerdo con los datos, en la Central de Abasto (Ceda) se duplicó el número de niños atendidos, “la necesidad es gigantesca”, señaló la funcionaria.

Por otra parte, subrayó Claudia Luengas, en el Sistema de Transporte Colectivo el problema requiere atención especial, porque aun cuando se detecta a niños, niñas y adolescentes víctimas de explotación, “en lo que llegamos ya no están, pues la movilidad en el Metro es al minuto y se requiere de un protocolo de atención específico”.

Indicó que 56 por ciento de los menores se dedica a la venta de algún tipo de comida; venta de dulces, 12 por ciento; venta de artesanías, 10 por ciento; artículos de temporada, 8 por ciento; venta de cosas usadas, 3 por ciento; pedir dádivas, 6 por ciento; venta de flores, 2 por ciento, y otro 3 por ciento se dedica a otras actividades.

Como parte de las acciones realizadas para prevenir y combatir este problema, la secretaria señaló que se han realizado 548 sensibilizaciones de los riesgos de laborar en la vía pública, 245 actividades lúdicas con los menores y se han firmado 247 cartas de derechos donde los padres se comprometen a no llevar a sus hijos a trabajar nuevamente.

JSL
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