Zacatecas, Zac. Para el candidato de la coalición en el Gobierno PRI, PVEM y Nueva Alianza, para el gobierno de Zacatecas, Alejandro Tello, la herencia que asumirá el nuevo gobierno que asegura encabezará, es muy compleja, no sólo por una pesada carga de la deuda que dejara el gobierno saliente, el desempleo acentuado en la entidad, sino también porque en materia de seguridad, la entidad, a pesar del reforzamiento de la presencia militar, es escenario del enfrentamiento de grupos delincuenciales.
«Zacatecas tiene una situación muy complicada y no podemos engañarnos», enfatiza. Secretario de Finanzas en los albores del sexenio de Miguel Alonso, el candidato priísta reconoce que la situación financiera del estado es compleja, derivado de una deuda que asciende a 12 mil millones de pesos, sino también de un déficit originado en los compromisos financieros del sector magisterial, pero apunta «no voy a patear el bote y que sean los gobiernos siguientes los que se hagan cargo».
Salpicado de la campaña de denostaciones que ha caracterizado la campaña, bajo las acusaciones de tener propiedades en Miami, Tello lo atribuye a un uso electorero de acusaciones sin fundamento. Y revira: «a mí no me han encontrado bodegas con mariguana ni me han acusado de vínculos con él narcotráfico».
-¿En el cruce de acusaciones se involucra incluso al gobernador al que acusan de corrupción?, se le preguntó.
-Si hay alguna malversación tiene que ser castigada. No soy tapadera de nadie. Yo no malversé un solo centavo en la Secretaria y mis cuentas ahí están a la vista de la gente, auditadas y validadas por el Congreso. Pero sí ha habido acusaciones, que se presenten no sólo en los medios, sino que se vayan a una instancia legal y si realmente hay un delito que perseguir que se investigue y se castigue. No sólo en medios, un se vaya a la instancia, que se investigue y se castigue.
En este contexto habla de tolerancia cero a la corrupción. También ofrece que en la integración de su gabinete, incorporará nuevas caras y una mayor rendición cuentas, además de poner fin a la opacidad.
Sin embargo, desvincula el exponencial endeudamiento bajo el gobierno de Alonso del mal uso de los recursos. «Endeudamiento no significa necesariamente malversación».
-¿No fue irresponsable haberla dejado crecer tanto?
-Quizá, responde el ex secretario de Finanzas de Alonso. Es una deuda que al final de cuentas viene acumulándose desde hace tres sexenios.
Para Tello, un aspecto clave para sacar adelante la entidad radica en una mayor atracción de inversiones y una mayor generación de empleos. Asegura que creará cuarenta mil empleos, porque ello le permitirá detonar el crecimiento de la entidad, pero también arrancar a los jóvenes al crimen organizado pues en la actualidad, sin opciones laborales y con una migración cada vez más difícil, son presa de la delincuencia.
La inseguridad es una prioridad inevitable para el estado. Tello señala que bajo la actual administración se reforzó la presencia del ejército mediante la creación de dos nuevas zonas militares al tiempo que se reforzó sustancialmente la policía estatal, en la lógica de avanzar al mando único en la entidad del cual, dijo el priísta, está convencido.
No obstante asume que aún falta muchas acciones más porque a nivel municipal, hay ayuntamientos en donde solamente tienen dos o tres policías. Prácticamente no existen por lo que en su propuesta destaca la utilización intensiva de la tecnología a través de videocámaras, mayor inteligencia y patrullas.
-¿Pero el crimen organizado rebasa las capacidades del estado?
Sí, a lo que yo le apuesto mucho es que el crimen no tenga elementos como los ha tenido de cultivo fácil, muchos jóvenes sin empleo ni escuela que de manera muy sencilla por una mínima paga van y engrosan las filas de la delincuencia. Les tenemos que pegar en sus recursos tanto humanos como materiales en el país.
Con independencia de lo que se instrumente en materia de inseguridad, Tello señala que la estrategia debe estar ligado directamente a la generación de empleos en la entidad y el desarrollo económico.
Inevitable abordar la intensidad de la campaña y la estrategia de su partido para descalificar a sus adversarios a través de cuestionarles sus antecedentes. Dice lamentar que se haya caído en una campaña de denostaciones y no de propuesta, pero acusa a Morena de ser un partido que ha centrado su campaña solo en la descalificación, sin oferta clara de gobierno.