Del cielo al infierno

Israel López Monsivais

Ricardo Gallardo Juárez parece ser un político pasional que en ocasiones realiza declaraciones sin consultar a sus asesores o sin medir las repercusiones de sus dichos. El mandar al diablo a la prensa, llamarla amarillista sin fundamento, insultar a un conductor de noticias en televisión y declararle la guerra frontal a medios de comunicación sin razón en un discurso del evento realizado en la colonia Santa Fe puede ser de un gran costo para su proyecto.

El patriarca Gallardo parece haber caído del cielo al infierno en su relación con los medios de comunicación del estado potosino en tan solo semanas. Podemos encontrar el punto de quiebra terminadas las festividades de Semana Santa con la investigación y la pregunta que realizó La Jornada San Luis: ¿Quién es Sandra Sánchez Ruiz? (nota publicada el 31 de marzo del presente año).

Es la interrogante de los medios locales la que terminó con la ira e intolerancia del alcalde capitalino a los cuestionamientos por la falta de transparencia. Ningún medio le faltó al respeto o se mencionó su vida privada. Cumplieron con su obligación de informar a la ciudadanía una asignación de 34 millones de pesos en compra de medicamentos con bastantes irregularidades.

El hecho ha sido retomado por periódicos de circulación nacional; Astillas de Julio Hernández López en su Astillero de La Jornada y una mención en la editorial Templo Mayor del diario Reforma. El área de comunicación social y los funcionarios del ayuntamiento han sido incompetentes con una respuesta convincente. O en su efecto no existe y fue una simulación de compra.

Interpretando el discurso del empresario avícola realizaré algunos comentarios. Cuando hace referencia a los contratos de publicidad con los medios de comunicación se equivoca al pensar que por tener un contrato de prestación de servicios los medios de comunicación lo deben alabar y dejar de denunciar las irregularidades en su administración.

En su intervención al mencionar que esta “politiquilla” no le asusta comete el error en interpretar los distintos géneros del periodismo. La nota fue una investigación documentada, objetiva y con sustento por el periodista Jaime Nava de La Jornada San Luis, de ahí la retomaron distintos medios de comunicación. Se vuelve político el asunto cuando columnistas y articulistas independientes realizan su labor combativa de denuncia y se discute en la agenda pública (aquí puede darse la subjetividad por que lo permite el género).

Y al finalizar su discurso expresó: ¡Ese y otro periodiquillo que después les voy a decir que no vale la pena! ¡Periodiquillos amarillistas que están en contra de que la ciudadanía se le siga apoyando con obra y con programas sociales! ¡Se pueden ir mucho al diablo! No creo que exista ningún periodista con ética que esté en contra de los programas con enfoque de justicia social. Lo que se denuncia es el gatopardismo con el cambio de discurso y las mismas prácticas al interior del gobierno local.

Por último, le recomiendo al presidente municipal que lea la última novela de Mario Vargas Llosa, Cinco Esquinas. Además de entretenerse con el erotismo con el que escribe el premio Nobel de literatura aprenderá lo que es la prensa amarillista. No es lo mismo la nota objetiva y las columnas como denuncia a la corrupción contraponiéndola con la prensa rosa y sensacionalista.

Aguijón: La Divina Comedia, obra escrita por Dante Alighieri, es un viaje por el infierno, purgatorio para llegar al paraíso. En el octavo círculo, específicamente en el quinto recinto del infierno, hay un espacio resguardado para los políticos corruptos. Y en el purgatorio la primera grada está dedicada a la soberbia. Por lo tanto, si Gallardo Juárez mandó a la prensa al diablo el escritor florentino le tiene un lugar reservado por su actuar.

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