Para evitar los intentos de extorsión telefónica en la entidad, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) hace un llamado a la población potosina en general tome las precauciones necesarias y no sean víctima de la delincuencia, por lo que sugiere no contestar la llamada de teléfonos desconocidos, colgar inmediatamente y denunciar los hechos ante esta dependencia.
La Policía Ministerial del Estado dio a conocer que este fin de semana se reportaron dos casos de ese delito, uno de los cuales logró afectar la economía de una familia –al concretarse la extorsión-, así como afectaciones en su estado emocional.
La Procuraduría General de Justicia en el Estado indicó que el afectado fue un individuo de nombre Gabriel, con domicilio en el fraccionamiento Jardines del Rosario, quien denunció haber recibido una llamada telefónica en la cual, en voz masculina, le aseguraba que tenían secuestrada a su hija y le exigían que para no hacerle daño, era necesario que depositara cierta cantidad de dinero.
Gabriel indicó que de inmediato fue presa del pánico, por lo que sin pensarlo más acudió a una tienda de conveniencia para depositar la cantidad de 2 mil pesos que se le solicitaba, sin embargo, más tarde descubrió que se trataba de un engaño al verificar que su hija se encontraba a buen resguardo y en excelentes condiciones de salud.
En el segundo caso, una persona de nombre José Guadalupe dijo haber recibido una llamada donde le decían que tenían privado de la libertad a uno de sus familiares, por lo que el afectado prefirió interrumpir la comunicación, optando por contactar a su familiar, quien en ese momento se encontraba en perfectas condiciones y en lugar seguro.
En ambos casos, las víctimas reportaron los hechos ante la PGJE, por lo que agentes ministeriales ya investigan el origen de las llamadas para tratar de localizar a los responsables de las mismas.
Con el fin de evitar este delito, la PGJE recomienda modificar las formas de comunicación como regularmente se acostumbran, supliéndolas por una comunicación defensiva, de manera que cuando alguien pregunte: ¿Con quién hablo?, se debe contestar ¿Con quién quiere hablar y cuál es su nombre?”.
Asimismo, la dependencia estatal recomienda contar con identificador de llamadas, y en el caso de números desconocidos, no se debe contestar, o bien, si decide hacerlo ponerse a la defensiva.
También es pertinente hacer caso omiso a llamadas de personas que se identifican como representantes de empresas, bancos, tiendas, compañías de seguros o encuestadores que pretendan obtener datos personales, pues probablemente serán utilizados para tratar de extorsionar.
Si la extorsión consiste en que presuntamente está detenido o secuestrado algún familiar a quien se le causará un daño, es preciso comunicarse inmediatamente con ese familiar, para descartar el hecho y denunciar ante la autoridad.
Frente amenazas concretas, no se deberá prolongar la comunicación telefónica ni aportar datos de ninguna naturaleza, aunque se refieran datos personales determinados, de la familia o del centro de trabajo, pues pueden ser falsos, y por ningún motivo se debe depositar dinero, además de que se sugiere denunciar los hechos inmediatamente a la Procuraduría General de Justicia del Estado.





