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Ciudadanos Observando dio a conocer que el Hospital Central facturó un millón de pesos en medicamento oncológico a nombre de una empresa fantasma que no tiene permiso de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
La organización detalló que al investigar a la comercializadora de nombre Ismalog, SA de CV, con domicilio fiscal en Quintas Gaviotas, Circuito Canarios, número 106, en Quintas de la Hacienda, en la capital potosina, se descubrió que se trata de una vivienda particular.
Cabe destacar que esta presunta empresa comparte RFC con una supuesta constructora en la que diputado Mariano Niño ha facturado diversos materiales.
En este sentido, Guadalupe González, vocero de Ciudadanos Observando, indicó vecinos de la zona le dijeron que en ese domicilio no vive nadie, por lo que consideró que el contralor Gabriel Rosillos está encubriendo esta operación, pues el funcionario ha afirmado que estos medicamentos sí se entregaron.
Finalmente, explicó que “nos pusimos en contacto con los laboratorios que fabrican sus medicamentos de gran control en su distribución y aseguró que jamás tuvieron alguna relación con la empresa Ismalog. Además, el domicilio fiscal es una casa particular donde la persona que habita y desconoce porque dirección aparece ligada a esa empresa”.
