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El líder de los pepenadores del relleno sanitario de Peñasco, Moisés Rodríguez Olalde, señaló que se están viendo fuertemente afectados por el incremento, cada vez más visible, de pepenadores independientes en la zona urbana, lo cual, sentenció, es consecuencia de falta de oportunidad de empleos y la pobreza que se vive en la ciudad.
Refirió que un pepenador obtiene un ingreso de 200 a 250 pesos por día, vendiendo el material reciclable que recolecta durante algunas horas.
También detalló que el tiempo de pepena de un camión recolector de basura es de 30 minutos, puesto que fue el acuerdo que se hizo con la empresa Vigue y con la Dirección de Ecología en la administración pasada, para posteriormente ser trasladado al sitio de disposición final, el nuevo relleno sanitario San Juanico.
Subrayó que en el nuevo relleno sanitario no se permitirá la presencia de pepenadores, pero anteriormente llegaron a un acuerdo con las autoridades de la Segam y de la Dirección de Ecología municipal acerca de este asunto y acordaron que ellos se quedarían en la plancha de pepena, a un costado de Milpillas, en el sitio de disposición final de Peñasco, a seguir haciendo la segregación.
La Dirección de Ecología de la administración pasada los apoyó en gran medida para garantizarles fuente de empleo, pues manifestó que “actualmente existe el decreto 537, artículo quinto, en el cual se nos garantiza la fuente de empleo a todo el gremio de pepenadores que laboran en la plancha de pepena”.
Durante el día, abundó, se tiene una afluencia de 250 pepenadores, mismos que cuentan con un horario de entrada y uno de salida, mas no un horario de trabajo para ellos.
Explicó que los materiales que se pepenan en el tiradero de Peñasco son el pet, cartón, polietileno y aluminio, en muy baja cantidad. Además, precisó que este último tiene un valor comercial alto, pero las personas, desde el origen de sus casas o negocios, hacen la separación y ellos mismos lo comercializan, por tal motivo les llega muy poco aluminio al tiradero.
