Uniones gays no pueden equipararse al matrimonio, señala Conferencia del Episcopado Mexicano

Jorge Torres

Ante el anuncio del presidente de México, Enrique Peña Nieto, para impulsar una reforma constitucional que apruebe los matrimonios entre personas del mismo sexo, la Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un comunicado en donde señala que se espera que el proceso legislativo para aprobar esta reforma pase por “un análisis profundo y escuchando todas las voces de la sociedad”, aunque de entrada afirmó que “no existe ningún fundamento para asimilar o establecer analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales y el designio de Dios sobre el matrimonio y la familia”. En este sentido también se pronunció el vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera.

El comunicado expone que los obispos de México valoran todas las propuestas y acciones que promuevan el reconocimiento y protección de los derechos de todos y el deber que cada persona tiene de respetar la dignidad de los demás, pero, ante las iniciativas dadas a conocer y que dan comienzo a todo un proceso legislativo y democrático, es necesario estudiar a fondo las consecuencias que conllevan: “estamos seguros que en la pluralidad que caracteriza nuestra nación todas las voces deberán ser escuchadas con seriedad y espíritu de diálogo constructivo, en pleno respeto a las instituciones”, enfatiza el documento.

Reitera que toda persona, independientemente de su orientación sexual, ha de ser respetada en su dignidad y tratada con compasión y delicadeza, procurando evitar todo signo de discriminación injusta y, particularmente, cualquier forma de agresión y violencia.

En lo que se refiere a las familias, menciona que se debe tratar de asegurar un respetuoso acompañamiento con el fin de que aquellos que manifiestan una orientación sexual distinta “puedan contar con la ayuda necesaria para comprender y realizar plenamente la voluntad de Dios en su vida”.

Finalmente, destaca la voluntad de servir en la construcción una sociedad mejor en la que nadie se sienta discriminado y solo. Termina el comunicado firmado por José Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara y presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana.

Priego pide tranquilidad; debe haber un debate profundo, dice

En este sentido, el vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera, aseguró que la Iglesia no quiere abonar a una polémica que en este momento no ayudaría a construir el debate público, pues hasta el momento no hay un comentario que sea la balanza: “hay personas que realmente se manifestaron en contra, otras a favor, esto es algo en que se debe tener la claridad de que apenas es una iniciativa, que no esta hecho nada”, puntualizó.

De la misma manera, el sacerdote argumentó que sólo se quiere reafirmar lo que la Iglesia siempre ha sostenido: la ideología de género no puede convertirse en pensamiento único, pues tienen que haber otros pensamientos, otras voces, y construir un debate democrático, por lo que hizo un llamado a la cordura de ambas parte y a mantenerse respetuosos.