Samuel Estrada
La titular de la Secretaría de Salud del Gobierno del Estado, Mónica Liliana Rangel Martínez informó que someterá a consideración de la junta de gobierno de su dependencia reducirse su sueldo, luego de que aceptara que percibe más de 220 mil pesos mensuales, no obstante indicó que su sueldo nunca ha estado fuera de lo que permite la ley.
Cabe destacar que la semana pasada durante su comparecencia ante el Congreso del Estado, la funcionaria reveló que sus percepciones ascendían a estos más de 220 mil pesos, lo cual sería ilegal, toda vez que la ley de remuneraciones de servidores públicos del estado impide que algún funcionario tenga un sueldo superior al del gobernador del estado, que actualmente gana alrededor de 140 mil pesos mensuales.
No obstante la funcionaria acotó que para empezar ella no eligió su sueldo, sino que ya estaba fijado desde que tomó el cargo, por otro lado no está sujeta a esta ley puesto que el 100 por ciento de su sueldo proviene de recursos director de la federación así como también refirió que el 32 por ciento de este dinero son impuestos, asimismo precisó que al tener este cargo, al mismo tiempo se convierte en una especie de delegada del sector salud en la entidad, esta es una particularidad que tiene el cargo respecto a otras secretarías y está sujeta a un tabulador de funcionarios federales.
Sin embargo estimó que luego de la polémica principalmente por estar recibiendo un sueldo más alto que el del gobernador del estado decidió poner a consideración de la junta de gobierno de la Secretaría de Salud una reducción de sus percepciones, para quedar en alrededor de 120 mil pesos que es lo que perciben sus pares de las otras secretarías de gobierno.
Finalmente Rangel Martínez externó que un mecanismo muy importante de la dependencia es la junta de gobierno, que es la que define este tipo de temas y aseguró que a pesar de que sea su sueldo “yo por ejemplo no puedo comprar un terreno o inmueble sin que la junta de gobierno me lo autorice”.





