San Cristóbal de Las Casas, Chis. El Movimiento Migrante Mesoamericano (MMM), afirmó que las y los integrantes de la Caravana de Madres de Centro América en busca de sus hijos que recorrió 11 estados del país en 18 días, “constatamos otra vez, el incremento notorio en la violencia y la violación de los derechos humanos desde que el gobierno de Enrique Peña Nieto impuso el Plan Frontera Sur en 2014, apoyado y financiado por el gobierno de Estados Unidos para detener los flujos migratorios centroamericanos”.
En un comunicado, agregó que “el Plan Frontera Sur intensifica las medidas de control, vigilancia, contención y militarización y ha obligado a las personas migrantes a viajar por rutas más remotas y peligrosas, que trazamos este año en la Caravana”, dedicada en esta ocasión a la memoria de la activista hondureña Berta Cáceres, asesinada en marzo pasado.
Dijo que “por estas veredas y caminos, las familias migrantes se vuelven presa fácil de grupos de delincuentes, del crimen organizado y agentes estatales corruptos” y “lejos de garantizar su seguridad y sus derechos, las políticas represivas del Estado han sumergido a los migrantes que huyen de la violencia y el hambre en sus comunidades de origen, en un infierno donde están expuestos a robos, extorsiones, violaciones sexuales, trata y tráfico, desaparición y muerte”.
Señaló que “los cónsules centroamericanos en la zona fronteriza informan que con la elección de Donald Trump, se ha incrementado el flujo de migrantes que intentan reunirse con sus familiares en Estados Unidos”.
El MMM, organizador de la Caravana denominada Buscamos vida en caminos de muerte, manifestó que “la propuesta antimigrante y racista del presidente electo de Estados Unidos, junto con la actitud sumisa y represiva del gobierno mexicano, auguran tiempos de más violaciones de derechos e inseguridad para los migrantes centroamericanos”.
Recordó que la caravana finalizó el pasado 3 en el Río Suchiate, fronterizo con Guatemala. “Fueron muchos los aprendizajes del camino, entre ellos el marcado contraste entre la generosidad de espíritu del pueblo mexicano y la indiferencia de muchos de los funcionarios gubernamentales hacia las tragedias humanas que genera la criminalización de las personas migrantes en el país”, aseveró la agrupación que dirige Martha Sánchez Soler.
Reiteró que lo anterior “refuerza nuestro compromiso de seguir presionando a las autoridades a la vez que construimos redes y solidaridades desde abajo”.
Afirmó que la Caravana, asesinada en marzo pasado, recorrió 11 estados, 30 ciudades y 3 mil 800 kilómetros; participó en decenas de eventos y logró cuatro reencuentros entre madres e hijos e inclusive entre dos hermanas que no se habían visto en 37 años.
Informó que con éstos, suman 269 reencuentros de familiares en los 12 años de recorrido por México, además de que el trabajo de la Caravana “ha arrojado decenas de pistas para seguir con la búsqueda de los 41 madres y padres que participaron este año, así como de otros cientos que quedan en casa y han encargado las fotografías de sus hijos e hijas a la Caravana para la búsqueda”.